Tu rostro es la primera parte del cuerpo que verás cada mañana, así como el más exhibido a contaminantes que pueden perjudicarla, por eso cuidarlo es nuestra tarea más importante para sentirnos agusto con nosotras mismas.
Es muy común no saber qué hacer, ni cómo atender nuestro cutis, por ello en este artículo te mostraremos el secreto para lograr una limpieza facial casera 100% efectiva, mediante una rutina que nos ayudará a mantener la piel sana y hermosa.
Seguro alguna vez te ha pasado, que te miras al espejo y notas que tu piel está opaca o sin vida. Esto es posible que sea porque necesites una limpieza facial. Para lograrlo solo necesitas crear una rutina de cuidado, como la que te mostraré ahora.
Sabías qué, aún sin salir de casa, nuestra piel también se encuentra expuesta a muchos agentes como el estrés, la contaminación lumínica y otras más. Estas pueden acelerar la oxidación, por tal motivo el cuidado facial es nuestro pilar fundamental para lograr una piel radiante y luminosa.
5 pasos para completar tu rutina de limpieza facial
La limpieza facial es un tratamiento para nuestro rostro que se recomienda realizar a diario en casa o con profesionales cada seis meses. La finalidad de esta rutina facial es eliminar todas las impurezas que se producen por la contaminación ambiental y lumínica, por las actividades del día a día y por el uso de productos cosméticos.
Ahora bien, ¿existe un orden en específico? La verdad es que sí. Toda rutina facial tiene un orden que se debe de seguir estrictamente, puesto que cada producto que se aplica tiene el propósito de preparar o proteger nuestra a nuestra piel del siguiente paso.
Por eso aquí te voy a dejar una guía de solo 5 pasos para llevar a cabo una limpieza facial casera completa, así evitarás que aparezcan granitos o acné, además de retrasar el envejecimiento.
- Asegurarte de que tu piel esté libre de cualquier impureza o residuo que impiden su oxigenación. Para lograrlo vas a ayudarte con uno o varios pads de algodón para aplicarte agua micelar o un producto desmaquillante específico para tu tipo de piel. Acá vamos a eliminar todo resto de maquillaje, células muertas o cualquier partícula grasa de tu rostro.
- Vamos a limpiar tu rostro, ya que con tu piel limpia puedes aplicar cualquier producto nutritivo. Usa un jabón o un gel limpiador facial, si es con ingredientes naturales, ¡mejor!. Es súper relajante hacerlo durante un minuto con masajes suaves por todo tu rostro y finalizas el proceso enjuagando con agua tibia.
- Después de la limpieza puedes usar mascarillas faciales, siempre acorde con tu tipo de piel. Nunca olvides el contorno de los ojos, ellos también necesitan de tus cuidados. Si añades este paso a tu limpieza facial casera, te aseguro que no te arrepentirás.
- Usa un tratamiento de nutrición y humectación para tu piel, esta es una excelente forma de ayudar a tener un cutis radiante y listo para el día a día. En nuestra rutina de cuidado facial podemos utilizar un sérum antioxidante, vitamina E, crema humectante facial o ampollas hialurónicas e intensivas, esto te ayudará a combatir el envejecimiento y recuperar la vitalidad de tu cutis.
- Por último, así como buscamos hidratar tu piel por fuera, no olvides hidratarla por dentro, al tomar al menos 8 vasos de agua al día. Para terminar este paso nunca olvides llevar protector solar para evitar el envejecimiento prematuro de tu rostro.
Rutina de limpieza facial casera según tipo de piel
Nuestro cuidado facial es de gran importancia e incorporarlo a nuestra rutina diaria, es vital. Por ello conocer nuestro tipo de piel nos ayudará a aplicar productos que le brinden mayores beneficios. Vamos a conocer que tipo de piel tienes:
Piel mixta
Se caracteriza por una combinación de piel normal-seca y grasa, si nos fijamos en la zona T (frente, nariz y mentón), notamos que es más propensa a las impurezas y sensaciones brillantes. Este tipo de piel es fácil de detectar.
Para tu piel mixta, se recomienda utilizar un desmaquillador en gel a base de agua, como Hydro Boost de Neutrogena. Este limpiador, desmaquillante e hidratante no contiene jabón, aceite, ni parabenos. De esta forma, le aportará hidratación adecuada a la zona T para lograr un equilibrio sin resecar tus mejillas, dejando tu piel fresca y suave.
Piel normal
Ahora si tu piel es normal, tiende a tener poros suaves, finos y una tonalidad rosada saludable, que no pareciera que necesitará de muchos cuidados, pero es importante brindar la hidratación y protección necesaria durante el día y la noche.
Una buena sugerencia es el gel micelar de la línea SkinActive de Garnier, el cual desmaquilla sin resecar tu piel, eliminando impurezas y restos de maquillaje, dejando un efecto fresco, hidratado y tonificante.
Piel grasa
El hecho de que nuestra piel sea grasa no significa que esté hidratada. Esto significa que el porcentaje de agua es menor que el de lípidos, por lo tanto tenemos que buscar productos ideales para mantener el equilibrio.
En lo posible trata de evitar usar productos en aceite porque eso sólo aumentará más el porcentaje de grasa. Usa productos a base de agua, que te aporten la humectación que necesita tu piel, esto ayuda a limpiar y retirar el maquillaje. Sin duda la mejor opción es el limpiador de The Body Shop muy adecuado para tu piel grasa.
Piel sensible
La piel sensible es más susceptible a los factores externos que cualquier otra piel, por lo que necesita mayor cuidado. No busques productos que contengan fragancias, alcohol o cualquier otro ingrediente que pueda causar una irritación.
Este tipo de piel tiende a sufrir de sequedad, deshidratación e irritaciones. Por esto es básico saber elegir los productos, como el Revitalift Serum de L’Oréal Paris un potente serum facial 100% natural, que nos aportará mayores beneficios a la hora de aplicarlo a tu rutina de cuidado facial.
Siguiendo estos pasos simples, se puede realizar una limpieza facial rápida, sencilla y eficaz con productos destinados al cuidado de la piel. Eso sí, procura usar siempre cosméticos que estén creados para tu tipo de piel y necesidad, para que tu higiene facial sea más óptima y especializada. ¡No lo olvides!